Navarra y el País Vasco Francés

Salida en autocar desde los diferentes puntos de recogida dirección hacia Navarra. El viaje en autocar nos permitirá hacer un trayecto de la forma más confortable. Desayunaremos a bordo y para hacer el viaje más corto, tendremos el autocar bien equipado.

Almorzaremos en un restaurante en ruta y llegada a Pamplona, donde nos alojaremos las cinco noches de nuestro viaje.

Esta tarde conoceremos la capital, Pamplona. Disfrutaremos de un recorrido a pie por el centro histórico visitando la Plaza del Castillo, centro neurálgico de la población. Subiremos la calle Estafeta hasta llegar a la parte alta de la ciudad, donde se alza la espectacular catedral, que nos llamará la atención por su fachada neoclásica. Visitaremos el interior, que custodia el sepulcro del rey Carlos III de Navarra y el claustro de la catedral, la verdadera joya del templo. También veremos las antiguas murallas de la ciudad y nos acercaremos hasta el ayuntamiento, con su impactante fachada barroca.

Cena y alojamiento.

Desayuno en el hotel. Hoy os proponemos un itinerario para explorar los seductoras y espectaculares valles pirenaicas. Pararemos en el mirador de Iso con su fantástica panorámica de Foz de Arbayún, la garganta más grande, bonita y espectacular, con paredes verticales de casi 400 metros de profundidad excavadas a lo largo de miles de años por el río Salazar.

A continuación os animamos a disfrutar de los colores del otoño en la Selva de Irati, a través de un mero paseo de poca dificultad recorriendo el río Urbeltza, hasta llegar la cascada del Cubo. Después de comer en un restaurante local, visitaremos Ochagavía, un pueblo de postal rodeado de altas cumbres y extensos hayedos, conocido por ser uno de los más pintorescos del Pirineo con su puente medieval, las callejuertas empedradas y los cuidados «caseríos».

Seguimos hasta Roncal, villa conocida principalmente por sus quesos y ciudad natal del tenor Julián Gayarre, donde tendremos la oportunidad de visitar su mausoleo, obra del prestigioso artista valenciano Mariano Benlliure. También visitaremos una quesería.

Después de un día lleno de experiencias, volveremos hacia Pamplona. Cena y alojamiento.

Desayuno en el hotel y salida hacia el Valle de Baztan, la conocida Suiza navarra, un territorio salpicado por municipios llenos de encanto con sus «caseríos» que conservan una fuerte identidad inmersos en este tesoro natural que custodia y conforman un paisaje único. Pararemos en Amaiur, para conocer la historia de los restos de su antiguo castillo, nos acercaremos hasta el antiguo molino para conocer su funcionamiento.

Llegaremos hasta la animada y bulliciosa Elizondo, capital del valle, donde haremos un agradable paseo descubriendo sus palacetetos de arquitectura tradicional, que dan a la villa un encanto especial. Después de comer en un restaurante local, nos trasladaremos hasta el encantador, centenario y mágico jardín de Señorío de Bertiz, para disfrutar de un placentero recorrido entre más de 120 especies arbóreas diferentes de origen autóctono y forastero.

Vuelta a Pamplona, cena y alojamiento.

Desayuno en el hotel. Hoy aprovecharemos nuestra estancia en tierras navarras para ir más allá de los Pirineos y conocer el País Vasco francés, precioso destino de veraneo que acoge numerosos pueblos encantadores. Llegada a San Juan de Luz, fue originariamente una antigua base de los corsarios vascos, embellecida posteriormente por la burguesía y actualmente es uno de los enclaves más atractivos de la costa vasca francesa, con su centro histórico lleno de coloridas casas tradicionales vascas con entramados de madera.

Continuamos hasta Ainhoa, uno de los pueblos más representativos, pintoresco y bellos de la región. Que nos sorprenderá con sus construcciones de piedra con contravinastres de vivos colores. Después de comer en ruta y ya de camino hacia Pamplona, haremos una parada en Zugarramurdi para visitar sus cuevas. Estas no contienen ni estalactitas, ni estalagmitas, pero conservan una atmósfera mágica, escenario de antiguos aquelarres y rituales de brujería bajo la luz de la luna. Al acabar, volveremos a Pamplona, cena y alojamiento.

Desayuno en el hotel. Hoy nos centraremos en conocer un poco más los centros de peregrinación más relevantes del conocido Camino Francés, que el rey navarro Sancho III el Mayor promovió en el siglo XI como la ruta oficial. Saldremos de nuevo hacia el sur de Francia hasta llegar a Saint Jean Pied de Port, uno de los principales centros jacobeos desde la antigüedad, y punto de partida de muchos peregrinos. Haremos un paseo a pie por el encantador centro histórico, lleno de tenderos de artesanía y veremos la iglesia, la torre del reloj y los restos de la antigua muralla.

Almorzaremos en un restaurante local. La siguiente parada la haremos en el puerto de montaña de Ibañeta, apreciada ya por los antiguos romanos que se ha convertido en el paso mítico donde los peregrinos vencen los temibles Pirineos antes de continuar con el último tramo de la vía jacobea. Antes de volver a Pamplona, visitaremos Roncesvalles, punto de paso obligado para los peregrinos que concentra una larga historia, y donde se sitúa el cautivador conjunto monumental de la Colegiata de Santa María, considerada una de las mejores construcciones de arte gótico francés de la península.

Al acabar, traslado a Pamplona, cena y alojamiento.

Desayuno en el hotel y, a la hora convenida, salida para volver hacia casa. En ruta sin embargo, haremos una parada en la villa de Olite, donde visitaremos el Palacio Real de Olite, una fortaleza con una fisonomía impresionante que a lo largo de su periodo de máximo esplendor, fue considerado como uno de los palacios más suntuosos y modernos de Europa, con jardines colgantes, agua corriente, decoraciones lujosas e incluso albergaba animales exóticos como leones o camellos. En 1813, el Palacio sufrió un devastador incendio que lo dejó en ruinas. Afortunadamente, a principios del siglo XX se iniciaron las obras de restauración. Actualmente, este monumento medieval es considerado más importante de Navarra.

Terminada la visita, iremos a comer y continuaremos el viaje de vuelta a casa. A la llegada, el autocar del Club del Viatger nos llevará a los mismos puntos de recogida del primer día.